¿Alguna vez has admirado un edificio y te has preguntado qué lo hace tan distintivo? El brutalismo es una de las corrientes arquitectónicas que ha dejado una huella indeleble en el diseño urbano moderno. Caracterizado por su uso audaz de materiales crudos y formas geométricas imponentes, el brutalismo no es simplemente un estilo arquitectónico, sino una declaración de intenciones.
¿Cómo se originó el estilo brutalista?
Los orígenes del brutalismo se remontan al legendario arquitecto suizo Le Corbusier y su obra maestra «Unité d’Habitation». Utilizando el béton brut, o hormigón en bruto, Le Corbusier logró transformar este material en algo sorprendente. Fue el británico Reyner Banham quien adaptó el término «brutalism» y fue en Reino Unido donde el brutalismo realmente alcanzó su esplendor y se convirtió en una representación de la nueva visión arquitectónica de la era.
¿Cómo es el estilo brutalista en la arquitectura?
El brutalismo se distingue por su enfoque en la honestidad estructural y la expresividad de los materiales. Este estilo se caracteriza por el uso predominante del hormigón sin tratar, a menudo con texturas ásperas que revelan las huellas de los moldes de construcción. Esta exposición de los materiales no solo ofrece una estética única, sino que también refleja la funcionalidad y la integridad estructural del edificio.
El brutalismo encontró su auge después de la Segunda Guerra Mundial en un contexto de necesidad de estructuras funcionales y económicas para la reconstrucción y la uniformidad. Europa y los regímenes soviéticos adoptaron la arquitectura brutalista como representación de sus ideales socialistas, lo cual despertó la creatividad de los arquitectos y su capacidad para crear construcciones únicas y significativas.
Sin embargo, el brutalismo también fue objeto de controversia y división. Mientras que algunos apreciaban la bruta belleza y la autenticidad de estos edificios, otros encontraron en ellos una frialdad poco acogedora. Con los años, el rechazo de la población hacia el brutalismo se convertiría en una constante.
Características del estilo brutalista
Entre las características más notables del brutalismo se encuentran sus formas geométricas angulares y su tendencia a crear estructuras masivas y robustas. Los edificios brutalistas suelen presentar fachadas de hormigón que pueden parecer ásperas o inacabadas, con una fuerte presencia de líneas verticales y horizontales. Las ventanas, frecuentemente pequeñas y distribuidas de manera irregular, refuerzan el carácter monumental y austero del diseño. Estos elementos no son meramente decorativos; están diseñados para transmitir la fuerza y la durabilidad del edificio, mientras que también buscan una funcionalidad pragmática.
Ejemplos arquitectónicos del estilo brutalista
- Unité d’Habitation de Marsella (1947-1952)
El ejemplo más emblemático de este estilo arquitectónico es el complejo paradigmático, Unité d´Habitation, del famoso arquitecto Le Corbusier que está ubicado en la ciudad de Marsella, Francia. Este edificio ha sido fuente de inspiración para muchas otras construcciones en Europa. Su forma de prisma rectangular con más de 50 metros de altura y 337 apartamentos son todo un ícono de este estilo.
- Torre Velasca, Milán (1956-1958)
En Italia, se erige una adaptación del estilo brutalista que se extiende a más de 100 metros de altura en un área que fue completamente destruida durante la Segunda Guerra Mundial. Su estructura final tiene forma de una torre medieval y consta de 26 plantas, fue diseñada por Ernesto Nathan Rogers y Enrico Peressutti, del grupo de arquitectos B.B.P.R.
- Habitat 67, Montreal (1967)
La tesis de grado del arquitecto israelí Moshe Safdie, que presentaba un diseño extravagante y formas modernas, finalmente se hizo realidad durante la Exposición Universal de 1967. Esta construcción sostenible consta de 158 viviendas, distribuidas en 12 niveles. Fue construida con 354 bloques de hormigón prefabricados.
- Trellick Tower, Londres (1966-1972)
En el estilo brutalista es necesario mencionar los ejemplos británicos, como la Trellick Tower diseñada por el arquitecto Ernö Gold. Este imponente edificio cuenta con más de 30 pisos y un característico diseño esbelto, reconocible fácilmente por su torre separada del resto del edificio y conectada mediante pasarelas.
En conclusión, el brutalismo y la arquitectura brutalista son más que simples construcciones de hormigón en bruto a la vista. Son ejemplos prominentes de cómo la materialidad y la grandeza de los materiales de construcción pueden fusionarse con la visión de los arquitectos para crear obras maestras que impactan en nuestro entorno e inspiran a las generaciones futuras. A través del brutalismo, podemos adentrarnos en un viaje de descubrimiento hacia el pasado, el presente y el futuro de la arquitectura en constante evolución.
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Fuentes: ¿Qué es el brutalismo y la arquitectura brutalista?
