La orientación académica podría controlar problemas psicológicos en los alumnos provocados por las condiciones de la pandemia
El porcentaje de orientadores académicos en España es muy bajo. Ana Cobos, presidenta de la (COPOE), explica la necesidad de el asesoramiento que los orientadores son capaces de dar a los alumnos en sus distintas etapas educativas.
Según un estudio publicado en 2019 por la Cumbre Mundial de la Innovación Educativa (WISE), un 94 % de los jóvenes españoles, entre 18 y 25 años, afirman que les hizo falta un mayor apoyo de orientadores y profesores para elegir sus opciones profesionales durante su trayecto académico.
La labor de dichos orientadores es multidisciplinar y, aunque su labor más conocida y cotizada es el apoyo de vocacional. Su labor va desde la prevención del fracaso y el abandono escolar, a la detección de necesidades educativas especiales, el asesoramiento psicopedagógico y la orientación sobre salidas laborales. La media, en España, es de un orientador por cada 800 alumnos, mientras que lo recomendado por la Unesco, que es de 250 alumnos por orientador.
¿Por qué son más necesarios que nunca?
Ana Cobos, presidenta de la Confederación de Organizaciones de Psicopedagogía y Orientación en España (COPOE), explica que: “La orientación es una disciplina relativamente nueva, y todavía no vemos la importancia que tiene. El sistema educativo siempre se ha basado en la docencia, pero hay una parte educativa y no docente, que es donde entra la orientación, que hay que potenciar. Necesitamos estar muy alerta de todas las variables que existen y que pueden reducir el rendimiento. El sistema educativo debe ir mucho más allá de lo académico; debe potenciar el bienestar y la felicidad de las personas. La salud mental es algo sobre lo que hay que estar muy vigilantes, y de hecho se espera una situación bastante grave respecto a la salud mental, debido a las secuelas de la pandemia, y si no se abordan vamos a tener problemas graves y estructurales”.
Para prevenir futuros problemas de carácter académico son necesario los orientadores, pero estos deben compaginar su trabajo con docentes preparados y abiertos a estos cambios que deben mejorar el sistema educativo. Para esto, la Universidad Internacional Iberoamericana (UNINI México) imparte la Maestría en Educación.
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